Ella quiso que él fuera un sujeto que no estuviera sujeto a nada. Por eso una tarde le dejó una carta sobre la mesa y se marchó. Ël no supo entenderla hasta pasado un tiempo.
La carta comenzaba así:
“No soy ese escondite donde se guardan todas tus miserias, entiendo de penas pero no conservo la magia de hacerte reír aún con los ojos agrietados...de llorarte. Me duele haberme apartado, no sé que fue o tal vez sucedieron tantas cosas que ya no vale enumerar. No quiero estar mientras los pájaros me informan que hay otro cielo, tampoco puedo cargar tu cuerpo casi muerto de ilusiones ni tus ganas de enfrentar al mundo subido a unos zancos. Para no tocar el suelo -me dijiste- contaminado -agregaste- yo interpreté que era hermoso pero se necesita más que eso para vivir. Por ejemplo, apoyar de vez en cuando los zapatos en el asfalto. Es fácil cuando se tienen resueltas las necesidades básicas, pero me gustaría admirar tus propias iniciativas mientras escucho de tu boca que me relaje. Que me relaje sería una especie de bálsamo en donde yo descansaría de tantas responsabilidades, en cambio debo pensar por vos, por mí y por el resto que nos une.
No te juzgo, sólo que ya entendí que el poder y el control no son parte de una relación. Tampoco me da para tirarte un salvavidas detrás del otro evitando que aprendas a salvarte.
Me pregunto si en medio de tantos cabos sueltos algún día podrás atarte a la vida. Sin depender, ni agradecer más de la cuenta. Hay una luna en cada esquina esperando a que gires. Es la intención, la mirada puesta en el infinito, es la magia de saberse libre, si es que por libre entendemos nuestra propia manera de recorrer el mundo..."
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No te salves:
ResponderEliminarhttp://espaciosparaempezareldia.blogspot.com/2009/08/sin-salvacion-posible.html
Y un beso que esté a salvo con tus letras
Espectacular!!
ResponderEliminarGran verdad, sino aprende a nadar de nada vale arrojarle salvavidas.
Ciertamente n se puede mantener una relación donde uno es el sumiso y el otro el ejecutor.
Abrazos!
estas palabras tendrían que haberme llegado hace unos años... entonces sólo supe cantar qué te vaya bonito de chavela vargas y después morirme.
ResponderEliminarBueno, admiro la valentía. Conozco muchas personas (me incluyo) que alguna vez escribieron cartas similares pero que terminaron en la basura, condenadas al olvido como las personas que las escribieron.
ResponderEliminarEs horrible llegar a sentir así en una relación, pero lamentablemente pasa. Qué importante es darse cuenta... más pronto, más tarde, da igual. DARSE CUENTA. Pero no siempre nos queremos nosotros mismos tanto o más que al otro, y elegimos el sacrificio.
Un beso grande, Euge. Hermosa entrada.
El respeto al espacio privado, a ese reflexivo metro cuadrado es una lucha constante. Existen seres que todo lo desean abarcar, aprisionan tanto que ahorcan el sentimiento. Lo que una vez fue bello, se torna dificultoso y desagradable...Contados seres, pueden enderezar su conducta. Otros, la gran mayoría, no lo entienden jamás.
ResponderEliminarUn beso María Eugenia.
Hablando de cielos en este año nuevo:
ResponderEliminar1. Los pájaros de aquí (y un poeta sevillano que vivió tiempo en Nueva York, Abelardo Linares) me dicen que no hay 'ningún otro cielo': "Y ningún otro cielo / que el que quiera llegarme de tu boca / húmeda de muchos besos".
2. Descubrí entre tus preferencias literarias, y lo leí ('Era el cielo') a Sergio Bizzio. Me gustó. Gracias.
enric
ResponderEliminarBenedetti, un genio. Gracias por el video del lado oscuro del corazón. Una gran película.
Otro beso enorme para vos
Eurice
ResponderEliminarLas relacionen deberían ser parejas, no? A veces es dura la lucha pero vale intentarlo.
Un abrazo
camino
ResponderEliminarserá para la próxima, aunque espero que no suceda. Tampoco estuvo mal lo de Chavela Vargas. :)
besos
La chica de la farmacia
ResponderEliminarSí darse cuenta, se supone que ese es el primer paso, que tampoco vale de mucho si barremos debajo de la alfombra. Hay que accionar para tener una vida más plena y sin tanto peso.
Un abrazote
Taty
ResponderEliminarLa invasión asfixia, pero hay quienes se hacen cargo del otro como si fuera un niño. ¿De qué hablamos cuando hablamos de amor?
Un abrazo lleno de espacios
Menosquemarx
ResponderEliminarQué lindos versos. Tal vez sea el mismo cielo en diferentes miradas.
Me alegro que te gustara el libro Bizzio es un gran autor.
Besos a cielo abierto
hasta en la despedida ella decidio por él...,
ResponderEliminar"Ella quiso que él fuera un sujeto que no estuviera sujeto a nada."
bravo saltar del tren!! me gusto ese perfil
bien escrito como de costumbre!
besos
Esta carta a sido el mejor salvavidas.
ResponderEliminarOjala lo pueda apreciar.
Siempre se esta a tiempo.
Un beso grande.
Ey! Que sea un buen año!
Horacio Fiorello
ResponderEliminarGracias lindo!
De eso se trata a veces el verdadero de amor. De soltar para crecer.
Un beso enorme
Cecy
ResponderEliminarY se estará a tiempo antes si existe alguien que nos tire un salvavidas. Una carta puede ser un gran principio.
Besos
Dime qué he de hacer y yo lo hago.
ResponderEliminarElla salió por la puerta en silencio.
Él encontró otra a la que preguntar porqué.
saber soltar...por ahí pasa la historia...
ResponderEliminary él entendió, parece...qué será de ambos ahora?
me dejaste pensando.
besos*
Todo lo que sucede mientras aprendemos a relacionarnos sanamente. Es complejo el amor.
ResponderEliminarPor dónde andarán, qué habrá sido de ellos...
Un abrazo
Rayu
ResponderEliminarSí, saber soltar y no entrar en una relación tan poco pareja.
Quien sabe por donde andarán, tal vez hayan aprendido.
Besos de intriga
Es la mutua salvación. Quien escribe la carta deberá hacerse cargo de haber tomado ese lugar. Lo bueno es que alguno se haya dado cuenta y saque la mano para parar la pelota.
ResponderEliminarUn abrazo!
Dejar lastre, caminar sin pesos.
ResponderEliminarNo siempre es fácil, nos acostumbramos a todo y luego...
Besos y besos
Nunca pensé que una pareja lo es porque la relación ha de serlo, pero tiene toda la lógica posible.
ResponderEliminarNo, no se puede vivir bajo un cielo cuando estás pensando en otros, necesitándolos. Darse cuenta es una suerte, decidir al respecto es la consecuencia.
Como siempre, me gustó tu texto. Por lo que dices y cómo lo dices
Besos
La carta la leí, pese a algunas señales, como de una madre a un hijo.
ResponderEliminarBeso.
MAGAH
ResponderEliminarLas culpas son compartidas, no?
Lo importante es lo que vos decís...que alguien pare la pelota.
Un abrazo!
Virgi
ResponderEliminarEl tema es no acostumbrarse e intentar establecer relaciones sanas. No es fácil.
Besossss
Alís
ResponderEliminarGracias por tus palabras. Lo bueno es estar donde uno quiera estar y disfrutar de ese momento.
abrazos
Fede
ResponderEliminarCada uno le dará su propia interpretación. En realidad es una relación de pareja-despareja, pero la lectura es de cada uno.
Un abrazo
Hay momentos en los que la osadía y la fuerza impulsan para tomar decisiones coherentes, como la entrega de esta carta. Ella fue sincera y honesta con él y a la vez, con su persona. No se puede convivir con una persona que no te infunde ilusión, ánimo y cariño.
ResponderEliminarMe agrada mucho tu forma de escribir, es muy dulce y muy clara. Un placer de lectura.
Un abrazo.
Convivir con alguien que antepone su libertad a costa de la de los demás, es un infierno. No sé si por que no estuviera sujeto, porque realmente él no lo estaba, pero por su propia salud mental, ella tuvo que marcharse...
ResponderEliminarPreciosa carta de despedida.
Escríbes como quien avizora nuestra profundidad aún no descubierta. Ese desequilibrio que nos mantiene en pie. Y tu voz es tan íntima que nos secuestra como un tren en movimiento. No hay plenitud comparable a la de la propia estrechez. Y desde ella, sucedemos. Quien no se ama lo suficiente es incapaz de amar a otros. Cuando el amor deja de doler, comienza a servír. Un abrazo a tu corazón, cronista del asombro.
ResponderEliminarAgotador todo cuanto ha intentado hacer para ayudarle, ¿no? Nos empeñamos, con frecuencia, en salvar lo insalvable. Nos negamos a reconocer que nadie es insustituible y que cada uno es suficiente para emprender la vida.
ResponderEliminarEstupenda la carta. Lo que sí es sorprendente, es que él, pasado el tiempo, la entendiese.
oliva
ResponderEliminarGracias bonita por tus palabras, es cierto que no se puede vivir con alguien que no te inspire tantas cosas necesarias. Sobre todo admiración.
Un beso enorme
Alice
ResponderEliminarA veces las despedidas son necesarias para seguir creciendo. Tal vez eso pensó ella al escribir la carta.
Unabrazo
Eli
ResponderEliminarMe halagas con tus palabras. En definitiva todo tiene que ver con el amor y con la falta del mismo. Y en esa inmensidad cada uno es un laberinto.
Te abrazo desde mi tren en movimiento
Hay algunos que hacen de su relación de pareja un parasitismo, uno lo pone todo y el otro se deja, tanto, tanto que olvida ser persona, se convierte en una sanguijuela que chupa todo el amor de su pareja hasta que éste se acaba y es entonces cuando le escribe la carta...escribes con maestría, me gusta mucho leerte...besos
ResponderEliminarDecidir siempre costará
ResponderEliminargramos de amor ... pero decidir sobre el peso de ese amor , nos costará kilos para poder entender las decisiones que tomamos en la vida.
Me gustó mucho esta entrada.
Besos.
Mafalda
ResponderEliminarTodo lo que no fluye naturalmente tiende a ser agotador. La bueno es que la vida sigue y siempre nos brinda oportunidades de sentirnos plenos.
Un beso enorme!
semilla
ResponderEliminarHola bonita! Cuanta polémica generó el tema, parece que las relaciones son bastante complejas. Nada peor que una sanguijuela. El deterioro es definitivo.
Un abrazo
Lucía
ResponderEliminarMe gustó como lo definiste. Ojalá más alla del peso de la decisión siempre podamos salvarnos de relaciones nocivas.
Un abrazote
Hay que ser fuerte para marcharse, para darse cuenta que el amor en ocasiones se transforma o se muere.. pero de esas relaciones que aprisionan hay que huir, correr!!!!
ResponderEliminarV de tierra
ResponderEliminarSí, hay que correr cuando es necesario. Zapatillas al lado de la cama...y la valija hecha.
Besotes!
Una relación debe ser una plataforma de paraíso y no una balsa en el mar del infierno. Pero es fácil decirlo y para muchos no tan fácil encontrarlo (o conseguirlo).
ResponderEliminarEso sí, para llegar al estado y la certidumbre que te permite escribir esas cartas hace falta ser valiente.
Un fuerte abrazo
Invadidos es posible que nos falte la respiración, la continuación dependerá siempre de como ejerzamos nuestra libertad.
ResponderEliminarEs un placer grande leerte. Como siempre estupenda entrada.
Un abrazo
Levantar a alguien constantemente en una relación, tirar del carro uno solo, es la fórmula magistral para que el amor se desvanezca. Ese yugo, pesa. Ninguno de los dos es libre hasta que se toma la decisión de tu magnífica carta.
ResponderEliminarEspléndida, como siempre, MªEugenia.
Un abrazo.
rh
ResponderEliminarLa teoría suele ser más sencilla que la práctica pero escribir es un buen comienzo.
Que tengas un hermoso año.
Un abrazo
Milu
ResponderEliminarA mi también me generó algo de asfixia. Nada mejor que la libertad de elegir.
Besos preciosa !!
Marisa
ResponderEliminarTal cual vos decís.La relación no sólo puede depender de la energía de uno. Es mucho desgaste y los resultados son obvios. Todo lleva a un equilibrio que por decantación sucederá.
Un abrazote
Hasta las mulas se cansan de tirar del carro, las personas no podemos vivir las unas por las otras y menos en una relación.
ResponderEliminarSiento mi perio de ausencia pero he vuelto
Besos
Hola 40añera! Bienvenida nuevamente al ruedo.
ResponderEliminarYa es muy complicado resolver las cosas de uno como para cargar el peso de alguien más. Es cierto, y mucho menos en una relación.
Un abrazo
Hacía mucho que no leía algo tan bueno. Bravo.
ResponderEliminarDices que él entendió la carta al cabo de un tiempo, pero también pudo ser que no entendiera nada, que quizá ni la releyera, el estaría subido a sus zancos y desde las alturas esas cosas no cuentan, probablemente su egoísmo le llevara a tirar otro cabo, de ese modo, y tras encontrar otro puerto seguro, él volvería a actuar como siempre lo ha hecho.
ResponderEliminarSuele ser así en cierto tipo de relaciones, ella probablemente se dio cuenta a tiempo (lo dice: “mientras los pájaros me hablen de otros cielos”) otras personas simplemente se dejan llevar.
Me ha gustado mucho, María Eugenia.
enrojecerse
ResponderEliminarGracias por tus palabras y me alegra que te haya gustado :)
Un abrazo
Flamingo
ResponderEliminarTal vez sea como vos decís. No es tan simple interpretar algo de manera uniforme. Lo cierto es que la carta sirvió para despegar de una situación perjudicial para los dos.
Me alegra tu visita.
Un abrazo
guauuu..
ResponderEliminarme ha golpeado este texto como ni imaginas...
voy a compartirlo...
un abrazo y gracias por estos retazos de poesia y sabiduria
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarFire
ResponderEliminarGracias linda!
Me alegra que te haya gustado. La realidad supera a la ficción :)
Un abrazo enorme
quiero leerte! publicá ya!! si?
ResponderEliminarbesosinéditos...
ResponderEliminarHola María Eugenia,
ResponderEliminarA mi parecer el mejor servicio que ella podía hacerle para darle una posibilidad de aprender a existir por si mismo.Magnifica entrada.
Un abrazo compañera.
Pasé por ver si estabas, en esta ocasión no hemos coincidido... ¡Se echan en fata tus textos! Espero estés bien.
ResponderEliminarUn besazo.
Anónimo
ResponderEliminarYa publiqué :)
besitos
sagi
ResponderEliminarentonces fue un buen gesto, no?
un fuerte abrazo amigo!
Mafalda
ResponderEliminarHola linda! Espero que coincidamos la próxima vez.
Un abrazote!